La mamá de 20 años y el padrastro de 24 fueron capturados por la tortura. Los padres, que se iban todo el día a trabajar, dejaban encerrado y amarrado a la cama a su niño de 3 años.
El infante, que según ellos era muy inquieto, duraba todo el día amarrado a la cama. Sin embargo, los gritos de auxilio alertaron a los vecinos, quienes se dieron cuenta de lo que ocurría.
La policía llegó a la casa, ubicada en el municipio de Madrid en Cundinamarca, y rescató al infante mientras que los padres fueron capturados por tortura agravada.
De acuerdo a la versión de la Policía, los vecinos ayudaron al niño a alimentarse antes de avisar a las autoridades de la tortura.
Este año la Policía ha recibido alrededor de 8 mil denuncias por violencia intrafamiliar, incluida la violencia contra menores de edad.
Si usted es testigo o víctima de violencia intrafamiliar puede hacer la denuncia a la Policía y la institución lo ayudará a que no siga sufriendo de este flagelo.